lundi 24 juin 2013

Pierre Grosjean, médico francés en Nicaragua (1983).

Los manifestantes desfilan en Managua, pasan frente a la Central Sandinista de Trabajadores gritando consignas contra la intervención yanqui. Carteles denuncian a Reagan, el lema “Alto a la intervención en Centroamérica” se mira en grande, otros recuerdan la “sangre de Pierre”. En eco, un mantel está escrito en francés dice “Reagan avec le sang de Pierre, nous réafirmons notre compromis avec le Nicaragua libre”. Pierre Grosjean, médico francés, murió días antes, asesinado por la Contra en el Norte del país.


Desfile en Managua tras la muerte de Pierre Grosjean.
A partir del año 1983, la agresión hacia Nicaragua dio un salto espectacular. Ronald Reagan promovió una política abierta de intervención en Centroamérica. Las fuerzas contrarrevolucionarias basadas principalmente en Honduras recibieron del Congreso norteamericano financiamiento, armas y logística. Ronald Reagan declaraba que "la seguridad nacional de todas las Américas esta en juego en Centroamérica". "Tenemos un interés vital, un deber moral y una responsabilidad solemne”.
El “deber moral” y “la responsabilidad solemne” orientaron a sistematizar el hostigamiento y el sabotaje para destruir los programas sociales sandinistas sembrando el terror en el campo: destrucción de los puestos de salud, asesinar a los médicos y alfabetizadores, atacar las cooperativas. A la par de la táctica de “Guerra de Baja Intensidad”, los Estados Unidos buscaron legitimar un “gobierno provisional” estableciendo una “zona liberada”: por ello, columnas de centenares de combatientes pasaron la frontera desde Honduras y lanzaron varias operaciones de gran envergadura como la ofensiva en la zona de Jalapa.

En este contexto, Pierre Grosjean trabajaba en Nicaragua. Era médico especializado en las problemáticas humanitaria y epidemiológicas en los países en vía de desarrollo. Había presentado su tesis de doctorado en enero de 1982 sobre “las condiciones generales de salud en las favelas de Rio de Janeiro”. En agosto de 1982, el doctor Pierre Grosjean llego a Nicaragua en el marco de un convenio de cooperación entre el Hospital Claude Bernard de Paris, el Comité de cooperación científica y técnico Francia-Nicaragua y ambos gobiernos.

Estaba encargado de cursos en la Universidad de León y llevaba una investigación sobre la prevención de la tuberculosis y la “lepra de montaña” (leishmaniosis). Su trabajo de campo lo llevo hasta Rancho grande, un pueblo del departamento de Matagalpa cerca de Waslala, donde casos de leishmaniosis habían sido detectados.

Entonces, se pensaba que la zona de Rancho grande no era muy peligrosa. En la mañana del 26 de marzo, el grupo de médicos fue despertado bruscamente en medio de explosiones y disparos. Todos se tiraron al suelo. Desde varias semanas, la Contra buscaba constituir una “zona liberada”; el ataque de Rancho grande movilizó a decenas de combatientes. Pierre nunca se levanto.
El pueblo contó 4 otros muertos y 17 heridos. Siguiendo esta táctica, la Contra mato entre enero y julio de 1983 cerca de 600 personas en Nicaragua.

La esposa de Pierre, Rosangelina, en un texto denunciando la responsabilidad directa de los Estados Unidos, afirmo que “los franceses viviendo y trabajando en Nicaragua están resuelto a seguir a la par del pueblo nicaragüense el trabajo empezado, como lo hizo Pierre Grosjean hasta el final”.


Pierre Grosjean, Nicaragua, 1983.

mardi 18 juin 2013

Benjamin Linder y el Comité de Portland.

El Comité de Solidaridad con el Pueblo de Centroamérica (PCASC, por sus siglas en inglés) fue fundado en 1979 por un grupo de activistas preocupados por la política militar y económica de los Estados Unidos hacia Centroamérica. En 1982, voluntarios de PCASC organizaron y ayudaron a aprobar exitosamente un proyecto de ley que exigió al gobierno federal a terminar con su apoyo militar al gobierno de El Salvador, involucrando y educando a cientos de miles de votantes.

En 1987, Ben Linder, un residente de Portland, fue asesinado por Contras en Nicaragua, y activistas incluyendo a los miembros de familia de Ben se organizaron a nivel nacional para llamar la atención a la muerte de Ben y la política exterior de los EEUU hacia Nicaragua.
En los años 90, el trabajo de PCASC ha cambiado su enfoque para poder trabajar en terminar con la globalización corporativa. PCASC organizó más de 400 miembros de sindicatos para participar en las manifestaciones de la WTO en Seattle en 1999.

En 2005, PCASC coordinó una campaña comunitaria, involucrando a comunidades de fe, organizaciones estudiantiles, y sindicatos para evitar que se aprobara el Tratado de Libre Comercio con Centroamérica (CAFTA, por sus siglas en inglés). La campaña tuvo éxito en presionar al Representante Earl Blumenauer (un creyente declarado en los tratados de libre comercio) para que votara no. En 2006, PCASC ayudó a organizar una marcha histórica a favor de los derechos migratorios en el Día de los Trabajadores, con más de 12,000 participantes, la mayoría de ellos latinos.

En el siguiente enlace, va un reportaje sobre Benjamin Linder : su trabajo, su compromiso, sus ideales... y su entierro en Matagalpa.


http://www.clama.org/especialde-benjamin-linder-2/

Ben Linder en Nicaragua.

mardi 11 juin 2013

Los talleres de poesia (2)

VIAJANDO A ESTELI

Hoy mientras iba al Taller de Poesia de Esteli
miré la carta que un muchacho camisa azul
mochila roja leia
y donde decia EPA. Esteli. Xiomara
en la carta le hablaba de las promesas
que el hizo durante la Cruzada Nacional de Alfabetizacion.
Que no olvidara decia.
Entoces pensé en Maria
la chavala aquella que quise una vez
y que todavia me espera.
PEDRO PABLO BENAVIDES
Taller de Poesia de Esteli, miembro del EPS.

Una muestra de la produccion de los talleres de poesia de las fuerzas armadas... sobre todo una muestra personal del Compañero Pedro Pablo Benavides quien escribio estos versos a finales del otro siglo, con otras siglas (EPA, CNA, EPS...). Siglas de un pais de pie que, por primera vez, liberaba la voz y permitia a uno verse a si mismo, frente a sus responsabilidades educativas, sociales, productivas o en la defensa. Los azares hicieron que Pedro Pablo me escribio en febrero de 2011,  indicandome las referencias del numero 5 de la revista "Nicarauac" donde se publico uno de sus poemas. 
Su nombre me sonaba... Sentia alguna proximidad porque estaba seguro de haber ya leido su poema, "A la miliciana de la que no supe el nombre". Junto a otros versos volvio a ser publicado en la Poesia de las Fuerzas Armadas en 1985, por el ministerio de cultura.


Los versos de los talleres de poesia tenian por caracteristica de ser inmerso en la realidad revolucionaria, con nombres, lugares, caidos, lagrimas, alegria, amores lejanos, sangre. Una poesia encarnada en un pais real y soñado a la vez. Pedro Pablo, tus versos no quedaron en el olvido, tampoco el sueño nuestro...

Camion del EPS (Managua septiembre de 1989 - foto L. Sanchis)

dimanche 9 juin 2013

Los Talleres de poesía de la nueva Nicaragua.

Los talleres de poesía proliferaron en todo el país pocos días después del triunfo revolucionario. Fue una de las primeras iniciativas del recién creado Ministerio de Cultura. Extrañaba al brigadista que entre los libros escritos por comandantes hubiera entre textos teóricos y discursos, poesía. Extrañaba al brigadista apenas llegado pero no a los Nicas cuya liberación significaba que realmente los hijos de Darío y Sandino se habían reencontrado con júbilo en la plaza, un tal 19 de julio.
Ernesto Cardenal, encargado del ministerio de Cultura se inspiro de la experiencia de Solentiname; Allí, la poeta costarricense Mayra Jiménez creó un taller de poesía entre los campesinos en 1977, y empezaron a escribir una poesía muy buena que luego había sido traducida en varios idiomas.


Palacio Nacional , Managua (foto L. Sanchis - 2011)

Cardenal relata en su libro “la Revolución perdida”:
Yo pensé que con el ministerio de cultura se podía hacer lo mismo en toda Nicaragua, y muy poco después del triunfo invité a venir a Mayra Jiménez, explique que el ministerio era en un experimento que no se había hecho en ninguna parte del mundo, ni aun en otras revoluciones, y no sabía si tendríamos éxito.
En Nicaragua siempre había habido muy buena poesía, de las mejores de América latina; para mi juicio la mejor; pero siempre había sido una poesía de elite, de gente culta; los versos del pueblo habían sido siempre malos, solo a base de rimas. El pueblo de poetas que era el pueblo de Nicaragua era un pueblo de rimadores. Yo encontré que era necesario enseñar a nuestro pueblo, que era tan amante de la poesía, las técnicas de la buena poesía moderna. Sobre todo el verso libre. Y eso hicimos en los talleres”.

Mayra Jiménez participo en organizar los Talleres de Poesía por todo el territorio como programa nacional. El primer taller de poesía se fundó en Monimbo por el simbolismo que ese barrio indígena de Masaya tuvo en la Revolución… Resistencia, mascaras, bombas de contacto y poesía. El segundo se fundó por las mismas razones en Subtiava, León. El árbol de Adiact iba a florecer de nuevo.
A partir de allí, se rego en todo el territorio. A las tres semanas del triunfo ya se convocaba al primer concurso de poesía. El Premio latinoamericano de poesía “Rubén Darío” con 320 poemarios llegados de todos los países de América latina o firmados por escritores exilados, originarios de países donde existe represión.  Roberto Fernández Retamar fue premiado por su libro “Juana y otros poemas personales”.
El primer número de la Nicararauac, revista bimestral del ministerio de cultura, publico en mayo de 1980 una serie de poemas “surgidos” de los Talleres. En realidad eran poemas de combatientes caídos o de poetas como José Coronel Urtecho o Joaquín Cuadra. La revista aprovecho esta publicación para presentar los talleres en los cuales se enseñaban técnicas adecuadas y los principios más fundamentales para escribir poesía. Nicarauac presentaba”: Son talleres eminentemente populares y se han fundado en comunidades indígenas, en barrios marginados de Managua, en muchas otras localidades del país, en algunas fábricas, en el Ejército y en la Policía.
Ernesto Cardenal había emitido unas reglas para la redacción:
  • No tratar de escribir con ritmos regulares ni con rimas.
  • Preferir la palabra mas concreta a la mas vaga.
  • Incluir nombres propios  de personas o lugares.
  • Procurar las imágenes que entran por los sentidos.
  • Escribir como se habla, y no con lenguaje “literario”.
  • Evitar los lugares comunes.
  • Abreviar el leguaje lo más posible.
Un procedimiento que otros actores de la cultura nica condenaron diciendo que lo que estaban haciendo era crear “Cardenales en serie”, pero sin la dimensión cultural del poeta… - El peligro de los talleres de poesía fue que la socialización de los medios de la producción poética también representaba la implícita imposición desde arriba de una visión nacional y un estímulo explícito de la construcción de tal visión en la cual teóricamente estaría incluido todo nicaragüense-(Craven, Juan Sobalvarro)… Dejaremos la polémica entre la Chayo y Cardenal. (¡Una polémica de 30 años!)
Lo importante es el movimiento tremendo que sacudió al país. Una nueva poesía, producto de los Talleres, sin estar desvinculada de la tradición de la mejor poesía nicaragüense anterior (de la cual naturalmente procede) se perfilo: el encuentro de la expresión mas directa aun, de una poesía mas clara aun, para todo el pueblo y hecha por el mismo pueblo. Hay en todos ellos una coincidencia temática: el recuerdo de los compañeros caídos, a los Héroes y Mártires, los episodios de la lucha, las tareas cotidianas de la revolución.
En 1985, Mayra Jiménez preparo la edición de poemas procedentes de los talleres de “Poesía de las fuerzas armadas”. Hay que imaginarse que las fuerzas de seguridad del paisito contaron con 27 talleres! Se llamaban Taller de Poesía de la Fuerza Aérea Sandinista, Taller de Poesía  de la Policía Sandinista de Transito, Taller de Poesía del Batallón blindado Ulises Tapia, Taller de Poesía  del Batallón Germán Pomares, Matagalpa, Taller de Poesía  de Ocotal, Taller de Poesía  de la Seguridad de Estado… entre otros. Nombres tan comunes, nombres que expresan otro tiempo; nuestro tiempo, nuestra utopía tan terca.


Poesia publicada durante la Revolucion Sandinista.
El comandante Hugo Torres, uno de los que se tomaron el palacio, escribió el prologo del librito:
“Se ha dicho que Nicaragua es tierra de lagos y volcanes y además de guerreros y poetas, y es cierto; pero que se haya dicho que Nicaragua tiene Fuerzas Armadas que además de producir victorias militares producen poesía, creo que no se ha dicho, o se ha dicho muy poco y muy bajo: pero además, algunos no lo creen; y es que cuando alguien asocia ideas alrededor de los militares o de un ejercito cualquiera, piensa en tanques, aviones, soldados con casco, mirada fría; piensa en cárceles, represión, guerra. La historia de la humanidad y en especial la de América latina recogen muchas tristes y amargas experiencias, donde los militares han sido precisamente los causantes o más bien los ejecutores de las acciones que han dado lugar – en esos casos- a esa triste realidad”.
“A nadie se la ocurre asociar a los militares con el canto, con la pintura, con la danza, con la educación permanente de sus hombres, con el teatro, menos con la poesía. (…)Ellos están educados para ser guardianes de los intereses de los explotadores; ¿Y qué si no eso fue la GN o la EEBI en nuestro país? Con la revolución afloraron todas las manifestaciones culturales y artísticas del pueblo, entre ellas la poesía. En nuestro país los hombres de las Fuerzas Armadas son parte del pueblo, el mismo que está en el Poder, al que pertenece todo el aire, todos los ríos, todas las escuelas, todo el futuro”.
“Este es un ejército diferente, una policía diferente, estos no son hombres que asocien el valor con la brutalidad, sino con la dignidad, estos son hombres que estudian, que conocen la historia de su Patria, hombres con conciencia, hombres que luchan y mueren por el pueblo, por defender sus conquistas”,
“Buena por su armonía y buena por su contenido : de amor y desamor, de rebeldía y de lucha contra la opresión y la injusticia, esta poesía ayer perseguida, vilipendiada, atacada por ser expresión de los intereses del pueblo, hoy ha reventado y se ha esparcido por los aires; como la de ayer esta es poesía de amor y desamor, de dicha o  de tristeza, pero toda es poesía que refleja una actitud positiva ante la vida, un inmenso amor por la revolución, una profunda convicción de que por fin el presente y el futuro nos pertenecen por entero”.

Hasta hoy, los talleres siguen siendo un ejemplo único en el mundo que despertó la expresión del pueblo nicaragüense : ¿quién no ha escuchado en una reunión, en un bus, a una anciana, a un chavalito de seis años, todo este conjunto ciudadano, esta locura urbana, esta humildad campesina de noche frente al fogón, declamar unos versos?
Cuando escuchas versos, sabes que estás en Nicaragua…

dimanche 26 mai 2013

Madeleine Lagadec, un caso cerrado tras 20 años de movilización.

La enfermera francesa Madeleine Lagadec fue asesina en 1989 por elementos de la Fuerza Aérea mientras trabajaba en un hospital guerrillero, situado en el cantón El Tortuguero, de San Ildefonso, en el departamento de San Vicente.

De acuerdo a las investigaciones francesas, Madeleine Lagadec fue torturada, violada y asesinada por elementos de la Fuerza Aérea Salvadoreña, durante un ataque que el ejército lanzó contra el mencionado hospital, hecho ocurrido el 15 de abril de 1989.


Las causas de la muerte de la joven, que desde 1983 estaba en América Central con los revolucionarios sandinistas, fueron confirmadas por una autopsia y expertos en balística, una vez que el cuerpo fue repatriado a Francia.

Convocatoria a una reunion en Paris para informar sobre el caso de Madeleine en abril del 1990.
Indica : "Testimonio del medico belga Marc Ingelbrecht quien trabajo junto a Madeleine".


En 1995, la Corte de Apelaciones de Rennes lanzó una orden de detención internacional contra el general Juan Rafael Bustillo, el comandante de la fuerza aérea Antonio Villamariona, el jefe de las tropas especiales Gustavo Adolfo Perdomo y el comandante del batallón de paracaidistas Alcides Rodríguez Hurtado, a quienes se les acusó de “complicidad en asesinato precedido y acompañado de torturas y barbarie”.

Ninguno de los cuatro fue perseguido, pues la ley de amnistía, vigente desde el final de la guerra civil, prohíbe interponer querellas ante la justicia local por crímenes y actos de barbarie cometidos durante el conflicto. Una comisión rogatoria para interrogar a los sospechosos en El Salvador, emitida a fines de 1998, tampoco dio resultados.

Un nuevo magistrado francés, Jean-Pierre Gimonet, retomó luego el expediente, pero los padres de la joven dijeron no tener muchas esperanzas frente a la “lentitud y las dificultades del procedimiento”. El veredicto emitido el jueves por la Corte de Apelaciones de Rennes, que tenía la opción entre un “sobreseimiento” y un complemento de investigación, “demuestra que la justicia quiere llegar hasta el final”, dijo el abogado de la familia de la joven, Yann Choucq.

Cuando el cuerpo de Madeleine Lagadec fue repatriado a Francia, la autopsia reveló que la mujer no había muerto durante el ataque aéreo, tal y como lo había aseverado el Ejército salvadoreño en su momento. Lejos de eso, las investigaciones arrojaron que ya en tierra, las tropas procedieron a violarla, torturarla y asesinarla. 

Material para protestar contra el gobierno Cristiani  y reclamar justicia para Madeleine
 y los compañeros asesinados  en abril de 1989.


De acuerdo a los acusadores franceses, el acto constituía una clara violación al derecho internacional humanitario. Producto de esa batalla legal, la Corte de Rennes, Francia, emitió en 1994 una orden de detención internacional contra los militares Juan Rafael Bustillo y Rafael Antonio Villamariona, jefe y comandante de la Fuerza Aérea, respectivamente; Gustavo Adolfo Perdomo Hernández, jefe de las tropas especiales; y René Alcides Rodríguez Hurtado, comandante del batallón de paracaidistas.

Francia acusó a los cuatro oficiales bajo el cargo de “complicidad en asesinato precedido y acompañado de torturas y barbarie”. El Salvador, sin embargo, se negó a extraditarlos bajo el argumento de la vigencia de la Ley de Amnistía y por el hecho de que son ciudadanos salvadoreños.

Es más, en diciembre de 1999, el ex presidente Francisco Flores ascendió al coronel Perdomo al grado de general.

A principio de 2005, dos de los cuatro oficiales se presentaron en la corte de Rennes como “testigos” y no en el marco de la extradición reclamada desde años. Declararon que “no tenían nada que ver con este crimen y que un tribunal salvadoreño los había declarado inocentes”


En marzo de 2009, 20 años después de haber emprendido esta larga lucha para juzgar a los asesinos de Madeleine, Gustavo, María Cristina, Carlos y Clelia, el tribunal de Rennes cerro definitivamente el caso por “falta de pruebas suficientes contra los 4 oficiales y ausencia de elementos nuevos”.

Propaganda distribuida para informar sobre el caso de Madeleine
junto a la traduccion del comunicado  del FMLN del 18 de abril de 1989 dimitiendo la version del ejercito salvadoreño.

lundi 20 mai 2013

Madeleine Lagadec, Brigadista de salud de Rio San Juan a San Vicente.


Madeleine llego a Nicaragua en julio de 1983 donde participo en las campañas de vacunación en Rio San Juan entre otras actividades. Aquí, reproducimos varios extractos de cartas que han sido publicadas en las revistas de solidaridad francesas. En estas pocas líneas, describe su encentro con un pueblo, con su lucha por la dignidad.

Encuentro con la Revolución (Nicaragua, 1983)

En una carta fechada de agosto de 1983, contaba a su familia el violento encuentro con el pueblo nicaragüense y la realidad de la lucha revolucionaria. (Publicado en “El Salvador”, junio-julio de 1989, Paris, francia – traducción del autor del blog)
Nicaragua? Súper, Por lo menos tan lindo como lo imaginaba, en muchos aspectos. Es mas pobre en el campo que lo que esperaba.
La Revolución? No es de fachada! En este aspecto, me siento tranquilizada. Por supuesto que todo el pueblo no es sandinista pero una gran parte lo es, y de manera muy linda. Tenemos mucho que aprender de ellos por su coraje. Aquí cuando se les escucha gritar “Patria libre o morir”, se te aprietan las tripas, porque van hasta el final. Domingo, estuvimos en el entierro de diez jóvenes de Masaya matados cerca de Bluefields. Te calienta el corazón ver la enorme movilización popular aquel día, pueblos enteros gritando consignas. Pero se te hela el corazón cuando ves los ataúdes cubiertos de flores. Si por lo menos fueran los últimos! Pero no, te estremeces al ver al cuerpo del representante de la UNAG torturado, hecho pedazos en San Carlos (Rio San Juan). Todo esto ocurre, por lo menos una vez por semana aquí. Entonces, inútil decirte que la defensa, aquí, es necesaria y por todas partes se miran consignas, pintas sobre la defensa militar. El pueblo esta de guardia de noche, nosotros también.
La Revolución es también la sinceridad y la sencillez de sus dirigentes. Es Daniel ortega quien nos recibe. Es Ernesto Cardenal quien se sienta con nosotros para comer un gallo pinto en el mercado. Es la mama de Daniel Ortega quien come con nosotros en platos no tan limpios o compartiendo un vaso esperando una fiesta donde la invitamos y que nunca comenzó a la hora. Es también el viejo campesino de una cooperativa a la cual se le entregan tierras (la reforma agraria sigue) que hace un discurso frente a miles de personas y termina abrazando al comandante Wheelock, ministro de la reforma agraria…
La salud, es difícil a pesar del enorme progreso realizado. Hay que ver los hospitales : el mas grande (que visitamos) posee solo una maquina de electrografía y ya no tiene alcohol. Todo hace falta, es fundamental…


Madeleine Lagadec - enfermera francesa.

La salud en Rio San Juan (Nicaragua, 1983).

En una carta publicada por el boletín “Solidarité Nicaragua” en otoño de 1983, Madeleine Lagadec, joven enfermera francesa describía las condiciones sanitarias en Rio San Juan, departamento al Sur-este de Nicaragua donde trabajaba.
La salud en este departamento esta condicionada por varios factores: Clima insalubre, caliente, húmedo, condiciones de vida sin agua potable (a excepción de San Carlos, donde esta contaminada pero menos que en otras partes). El agua corriente solo existe en San Carlos, una vez al día, de las seis hasta las ocho y esto no todos los días. Entonces, hay que imaginarse un hospital funcionando sin agua potable. Cuando llega el agua, se llenan los tanques, muchas veces sarrosos.
En el campo, la situación es mas grave. No solamente porque el agua corriente no esta instalada en los cinco otros municipios pero además no esta potable... muchas veces, el agua utilizada por todos tipos de usos (limpieza, bebida, cocina) proviene del rio, el rio San Juan. Cuando llueve, esta agarra un color rojo, turbio, sin olvidar a la tradición: aquí, se dice que el agua purifica todo, entonces se echa las aguas negras, los excrementos… Esto nos explica que la principal patología encontrada fuera la diarrea. Amebas y parásitos de todos tipos allí pululan. Consecuencia: La mortalidad infantil hasta 1979 era de 180 por mil. Actualmente paso a 140 por mil, a pesar de que las cifras no sean precisas. Las Unidades de Rehidratación Oral (URO), que funcionan en toda Nicaragua, aquí no existen por falta de material…
Familias enteras viven en la promiscuidad bajo bacas negras esperando que fueran construidas casas provisionales. Las lluvias abundantes transforman el campamento en un gran campo de lodo, lo que multiplica las enfermedades… La humedad, las lluvias frecuentes dañan rápidamente estas casitas precarias. La comida es poca variada, mañana, mediodía y noche: frijoles, maíz y de vez en cuando un poco de carne. Las amenazas de guerra y de intervención imperialista deterioran entonces las condiciones sanitarias, ya deficientes, en la región del Rio San Juan.
Dos años mas tarde, de regreso en Bretaña, Madeleine obtuvo su diploma de medicina tropical. A finales de 1985, siguiendo su compromiso humanitario e izquierdista, decide unirse a la lucha del pueblo salvadoreño.


Campamento "El Roble".
 La Montañona - Chalatenango (Foto L. Sanchis - 2007)

Un Hospital del Frente Farabundo Marti (El Salvador, 1989).

Madeleine Lagadec, tenia veintisiete años y trabajaba desde hace tres años, por medio de una organización humanitaria suiza, en un hospital de campaña del Frente Farabundo Marti. Antes, esta joven milito en la Juventud Obrera Católica y el Socorro Popular Francés.
El 15 de abril de 1989, los militares salvadoreños al servicio de la extrema derecha al poder desde el asesinato en 1980 de Mgr Romero, atacan durante un operativo en San Vicente, el hospital de campaña. Tras un bombardeo, un batallón de paracaidistas y una unidad de “operaciones especiales” de las fuerzas aéreas salvadoreñas se apoderan del edificio donde se encontraban Madeleine, Gustavo Ignacio Isla Cazares, médico argentino, María Cristina Hernández, brigadista de salud, Carlos Gómez y Clelia Concepción Díaz Salazar, militantes del FMLN.
Algunos días más tarde, la familia Lagadec se entera por vía oficial de que la joven muchacha habría fallecido en el bombardeo… pero alertada por una llamada telefónica del Frente, debía conocer cruelmente la verdad.
Se había capturado a Madeleine viva, torturada y luego asesinada como los otros miembros del cuerpo médico. Dos auxiliares de enfermería ocultados a algunos metros de allí, escucharon todo: los militares llamando a sus oficiales después de haberse dado cuenta de que su víctima era una extranjera, los gritos de terror de la joven muchacha, un tiroteo al término las ocho horas de torturas.
En Francia, la emoción fue viva. La hermana de Madeleine viajó a El Salvador y gracias a la embajada de Francia consiguió obtener la repatriación del cuerpo que fue llevado al hospital de Brest, en Bretaña al Oeste de Francia. La verdad estalló en todo su horror: antes de matarla de varios disparos, se había violado a Madeleine, mutilada, se le había cortado una mano. La familia Lagadec presentó denuncia para la justicia francesa para torturas, asesinato y actos de crueldad, pero el juez de instrucción de Brest concluyó al cabo de cinco años a un no lugar. Al mismo tiempo, en El Salvador, el Gobierno de derecha decreto una amnistía de todos los delitos cometidos antes del final de los combates, garantizando así la impunidad de los criminales.

Entrada del tatu "el hospitalito" en El Roble.
La Montañona - Chalatenango (Foto L. Sanchis - 2007)



                 "Lorsqu'il s'agit de la liberté, de la fin de l'exploitation, de la misère de tout un peuple, il faut savoir reculer ses limites."

                 “Cuando se trata de libertad, del fin de la explotación, de la miseria de todo un pueblo, hay que saber ir más allá de sus límites

Madeleine Lagadec

mercredi 15 mai 2013

Confesion (Paulina Herrera).


Me acuso, Padre,
de querer a un país que no me pertenece.

Mi confesión es una larga lista de pecados:
querer robarme los atardeceres,
la sonrisa de un niño,
las viejitas del campo, en Chinandega,
La luz de amanecida sobre el lago,
los volcanes y los algodonales...

Me acuso, Padre,
de querer robarme este país entero.

Quiero hacer un paquete con esta Nicaragua
y llevarla conmigo
para que me consuele en otro exilio.

Paulina Herrera, chilena, Diciembre de 1980

Palacagüina - 2011 (Foto L. Sanchis)

mercredi 8 mai 2013

Nuestra America, una pelicula de Kristina Konrad.


Tuve la oportunidad de ver la pelicula "Nuestra America". Su autora, Kristina Konrad vuelve a Nicaragua o mas bien a un pais que ya desaparecio : la Nicaragua libre.

20 años despues, vuelve a encontrar a protagonistas de precedentes documentales que rodo en la Nicaragua sandinista. La puerta de entrada a esta Nicaragua desaparecida es una simple foto : dos muchachas del Batallon de Mujeres Veronica Lacayo. A partir de esta foto nos invita a este reencuentro. El dialogo no solo opera entre Kristina Konrad y las personas que encontrara en su busqueda... Otro dialogo se desarolla a lo largo de la pelicula entre los protagonistas del actual documental confrontados a las imagenes de archivos de los años 1980... los ecos de la esperanza vuelven a despertar.
Entre los archivos aparecen varias imagenes de las brigadas suizas asi que una corta entrevista de Yvan Leyvraz, brigadista suizo que murio en una emboscada de la Contra en 1986.

Una linda pelicula. Mejor dejamos la palabra a Kristina Konrad...

„Supuestamente las revoluciones no tienen un buen porvenir. Pero allí se confunden dos cosas: el porvenir de las revoluciones en la historia y el “hacerse revolucionario” de los seres humanos. En ambos casos ni siquiera se está hablando de las mismas personas. La única oportunidad del ser humano es el “hacerse revolucionario”, sólo así se puede evitar la infamia o responder ante lo intolerable.” Gilles Deleuze, 1990.

Mujeres en la defensa de la Revolucion - Nicaragua.


Kristina Konrad, cineasta suiza presenta su pelicula.
Los dos años que pasé en Nicaragua fueron el periodo en el que viví los momentos más intensos y más controvertidos de mi vida.
Julio Cortázar la llamaba: « Nicaragua tan violentamente dulce ».
Una Revolución en medio de una encrucijada, es decir, entre el deseo por un reinicio radical y la necesidad de reconciliarse y abrirse. Una Revolución que mueve cielo y tierra, encontrándose prisionera por todo lo que faltaba y en un estado de dependencia brutal del “mundo exterior”.
Una Revolución caracterizada por la re-construcción y destrucción; por una profunda religiosidad y un espíritu rebelde, así como por el deseo de llevar las riendas del destino.
Nunca me había reído tanto como con aquella gente atormentada y marcada por guerras y la miseria. Y sin embargo, su fatalismo me enervaba a mí como europea, de la misma manera que su capacidad de improvisación me dejaba asombrada.
La suave belleza del país engaña…, volcanes vomitando lava, tierras áridas, huracanes y tempestades arrastrando casas y personas, la tierra temblando y abriéndose…año tras año confrontados a alguna catástrofe.
Y como por arte de magia esa aridez se transforma, después de la primera lluvia, en un verdor exuberante y floreciente.
Fue una relación intensa y un contacto con un país y su gente que nunca más volví a experimentar de esa forma. Ahora, mirando hacia atrás, podría afirmar que fue también mi encuentro con el “hacerse revolucionario” de los seres humanos y su esperanza de llevar una vida digna. Una esperanza que aun en las circunstancias más difíciles provocaba un sin embargo lleno de humor.
Esa Nicaragua agitada, abriéndose camino, de cambios e historias sorprendentes atraía como un imán: miles de norteamericanos y europeos, acostumbrados a una buena vida material y casi completamente desacostumbrados a soñar, renunciaron al encanto del consumo, es más, a la ducha cotidiana y “a una copiosa cena ganada con el sudor de sus frentes.”
Ellos se expusieron a peligros de muerte y, especialmente, a una vida cotidiana bien difícil, vivieron y trabajaron en Nicaragua apoyando la Revolución pero también luchando por sus propios sueños.
La Revolución nicaragüense tampoco tenía un buen porvenir. Nicaragua tiene hoy un gobierno neoliberal. El pueblo le quitó el poder a la Revolución a través de elecciones democráticas. Cabe agregar que, en el transcurso de una guerra sucia, dirigida por los Contras y financiada por NUESTRA AMERICA, los Estados Unidos, 50.000 personas perdieron la vida antes de que el pueblo se decidiera democráticamente contra los sandinistas.
También se podría hablar de la corrupción progresiva de los sandinistas, algo que llevó a que muchos líderes intelectuales les dieran la espalda. En 2001, durante la campaña electoral entre los neoliberales y los sandinistas, el cura, poeta y ex ministro de Cultura sandinista Ernesto Cardenal lo formuló así: “Por un lado, tenemos al capitalismo auténtico y por el otro, una revolución falsa. Son dos males diferentes.”
No obstante, lo que sí se perdería con esto sería la comprensión del « hacerse revolucionario », de ese momento en donde lo imposible se hace posible, donde la historia pierde sus cabales y lo utópico parece (ser) algo concreto. Es ese el momento que más me ha interesado e inspirado para realizar este proyecto.
Sentí miedo de regresar a Nicaragua, miedo de ese “nuevo” Nicaragua. Y sí que viví otro país.
A primera vista, Nicaragua se ha convertido en un país « normal » del Tercer Mundo; una normalidad que significa ante todo, miseria incipiente, desempleo y corrupción. Es decir: Una vida bajo condiciones infrahumanas, y quizás lo peor: la falta de esperanza.
Aparte de todo eso, sentí un país traumatizado por la guerra, la corrupción y las catástrofes. Un país que parece como un enclave de Estados Unidos cerrando los ojos ante su propia historia.
Quizás la película sea también un intento de darle cabida a “ese momento” de la historia.

"Nuestra America" Kristina Konrad.


Referencias de la pelicula "Nuestra America" :
weltfilm gmbh
Hufelandstr. 42
D-10407 Berlin

www.weltfilm.com

lundi 6 mai 2013

Carta de Matagalpa. (1987)


21 de enero de 1987.

 Hola camaradas:

Les escribo desde la UPE (Unidad de Producción Estatal), que está cerca de la plantación de café.
Aquí hay internacionalistas de muchos países.

Nos encontramos en una zona que es blanco de los contras pero ahora no están activos. Antes la cosecha de café la hacían hombres armados. Ahora no es así, pero hay un equipo que vela por nuestra seguridad. Esta UPE es la más importante debido a la gran cantidad de café que se recoge en ella. Esto quiere decir que también para los contrarrevolucionarios es importante.

La UPE tiene una estructura orgánica concreta. Hay un oficial militar central y un funcionario político. Formaremos batallones de 30 miembros cada uno con camaradas de diferentes países. Esto tiene la ventaja de que garantiza nuestra participación en todos los batallones, puesto que tenemos buenos resultados en nuestro trabajo…

… saben que comemos, por supuesto…Lo que si es seguro es que nosotros seremos la primera brigada de este año también. Excepto si las hermosas chicas de los otros equipos nos lo hacen difícil…

Brigada internacional "Augusta C. Sandino" de la FMJD en Nicaragua (1987)

vendredi 3 mai 2013

Guerra de la información (2)


Mientras intelectuales franceses se preocupaban por el porvenir “democrático” de Nicaragua, pidiéndole al Congreso norteamericano “ayudar” a los Contras (ver el primer documento “Guerra de la información”), otros intelectuales se solidarizaban con los sueños de la Revolución Nicaragüense.
 Desde 1983 denunciaron la agresión militar dirigida por Washington.

 Siete escritores mundialmente famosos- Heinrich Böll (Alemania), Julio Cortazar (Argentina), Gabriel García Márquez (Colombia), Carlos Fuentes (México), Günther Grass (Alemania), Graham Greene (Inglaterra) y William Styron (Estados Unidos)- declararon solidariamente en abril de 1983 su punto de vista contra esta “guerra inmoral”:

  “El actual gobierno de los Estados Unidos ha comenzado una guerra contra el pueblo y el gobierno nicaragüense.
Es una guerra no declarada la cual nunca fue autorizada por el Congreso y por tanto viola contra la Constitución de los Estados Unidos.

Es una guerra secreta. El pueblo norteamericano no ha aprobado nunca fondos públicos para esta guerra que se realiza solamente capa de operaciones del servicio de inteligencia.

Es una guerra irracional. Una guerra que rechaza negociaciones diplomáticas, sin siquiera haberlas iniciado seriamente.

Es una guerra reaccionaria. Los Estados Unidos crearon y apoyaron la dictadura somocista durante más de 40 años. Ahora no pueden tolerar un gobierno independiente en Nicaragua. Han armado a los antiguos miembros de la Guardia Nacional somocista para que actúen contra el pueblo nicaragüense.

Es una guerra inhumana. Está destruyendo los modestos pero claros éxitos de la Revolución nicaragüense. Está destruyendo las cosechas y las escuelas de Nicaragua. Está matando a los niños y campesinos de Nicaragua.

Es una guerra peligrosa. Saca la problemática nicaragüense y centroamericana de su contexto específico y la arroja al escenario del conflicto Este-Oeste. Esta manipulación puede extender la guerra a nivel internacional y destruir las posibilidades de diplomacia, democracia y progreso social en la región.

Es una guerra hipócrita. Es la cuarta vez en este siglo que los Estados Unidos han encontrado un pretexto para intervenir en Nicaragua. Esta vez se lleva a cabo a través de « representantes lacayos » instigando a que el hermano mate al hermano, a que un país combata a otro país. Es una guerra inmoral. Una vez más, una superpotencia manifiesta estar amenazada por la independencia de un pequeño país e intenta someterlo a través de la intimidación y la destrucción.
Estamos preocupados de que los Estados Unidos quieran imponer y justificar su política creando « hechos », sin permitir un espacio al debate y a la contradicción. Al mismo tiempo, creemos que el pueblo norteamericano, la opinión pública y sus instituciones democráticas se rebelarán contra esta aventura no declarada, secreta, irracional, inhumana e inmoral del gobierno de Ronald Reagan”.